Inma Lorente. Evolución hacia la felicidad

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viernes, 9 de agosto de 2013

LA SAL MAS VALIOSA QUE EL ORO

Quizás eres una de esas personas que ve la sal como un enemigo, pero te has planteado seriamente si la sal es perjudicial para el cuerpo, o si lo que es perjudicial es la sal industrial?

La sal marina natural contiene 92 minerales esenciales, mientras que la sal refinada y adulterada (un subproducto de la industria química) solo contiene dos elementos, el sodio y el cloro.

La sal marina natural (agua de mar reconstituida) permite a los líquidos traspasar sin problema las membranas del cuerpo, las paredes de los vasos sanguíneos y los glomérulos (unidades de filtrado) de los riñones. Cuando aumenta la concentración de sal natural en la sangre, la sal se combina rápidamente con los fluidos de los tejidos circundantes. Esto, a su vez, permite a las células extraer más alimentos del fluido intracelular enriquecido. La sal industrial, por el contrario puede llegar a ser un peligro para la salud. Impide el paso libre de líquidos y minerales, lo que  provoca la acumulación y el estancamiento de fluidos en articulaciones, conductos y nodos linfáticos, y riñones. El efecto deshidratante de la sal comercial puede propiciar la formación de cálculos biliares, aumento de peso, hipertensión arterial y otros problemas de salud.
 
El cuerpo precisa sal para digerir adecuadamente los hidratos de carbono. En presencia de sal natural, la saliva y las secreciones gástricas pueden descomponer las partes fibrosas de los alimentos a base de hidratos de carbono. En su forma disuelta e ionizada, la sal facilita el proceso digestivo y desinfecta el intestino grueso.
La sal industrial provoca exactamente lo opuesto. Para que la sal resista la reabsorción de humedad y sea más fácil de usar para el consumidor, las fábricas le añaden químicos entre los que encontramos desecantes, desapelmazantes y blanqueadores. Después de esto, la sal ya no se puede mezclar con los fluidos del cuerpo humano, debilitando así los procesos bioquímicos y del metabolismo esenciales del cuerpo. Los problemas en los riñones, la retención de agua y la hipertensión son las consecuencias directas de la ingesta de sal refinada, la cual está presente en cientos de alimentos elaborados. Aproximadamente la mitad de la población de Estados Unidos, p.ejemplo, sufre de retención de líquidos, lo cual es la causa principal de la obesidad y del aumento de peso. La mayor parte de la culpa es debido al consumo de enormes cantidades de sal refinada.
Hace muchos años, antes de que el método industrial se utilizara para producir sal se tenía a ésta como la materia prima más valorada de la Tierra, incluso más que el oro. Constituía una parte importante del pago al ser utilizada como moneda, y de ahí proviene incluso la palabra “salario”. Existían “rutas de la sal” en casi todas las regiones, incluso los romanos tenían especial cuidado de sus minas de sal, pues era parte de las riquezas del imperio. En el tiempo de los celtas era utilizada como remedio para afecciones físicas y mentales así como graves quemaduras. Se ha demostrado a través de varias investigaciones que el agua de mar restablece el equilibrio hidroelectrolítico, elemento esencial para un buen sistema inmunológico.
 
Desde hace pocos años, la sal ha adquirido una mala reputación y la población ha llegado a temerla, de igual manera que se teme al colesterol y a la luz del sol. Incluso muchos galenos recomiendan a sus pacientes que no ingieran sodio y alimentos que lo contengan. Sin embargo, la ausencia de sal implica un mayor riesgo de carencias de minerales y oligoelementos y varios trastornos asociados. Ingerir sal sin refinar, además de que provee al cuerpo de sus necesidades de este mineral, no afecta el equilibrio hidroelectrolítico.
De los diferentes tipos de sal que existen, la sal del Himalaya se considera la mejor y más nutritiva, aunque de manera general todas las sales no refinadas son buenas.
La sal refinada, se podría decir que no aporta mucho al cuerpo. Incluso es la causa de varias enfermedades y problemas de salud incluidos los cálculos biliares. La única sal que el ser humano puede asimilar y digerir debidamente, es la sal marina sin refinar y sin procesar, así como la sal de Roca.
Entre las más importantes funciones de la auténtica sal sin refinar, podemos citar las siguientes:
Regulador de tensión arterial, elimina la acidez de la células del cuerpo, produce un equilibrio de azúcar en sangre, es generadora de energía hidroeléctrica celular, contribuye a una mejor absorción de nutrientes en el tracto intestinal, limpia los pulmones de flemas y mucosas, elimina el catarro y la congestión de los senos nasales, es antihistamínico natural, previene calambres musculares, previene el exceso de saliva, es un gran refuerzo de los huesos (el 27% de la sal corporal se halla en los huesos), es reguladora del sueño, previene la artritis, la gota, las venas varicosas y las vasculares de piernas y muslos.
 
 

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